Destaca el interés de nuevos distribuidores que no comercializan carne de caza y del sector de los platos preparados
El pasado miércoles terminaba una nueva edición del Salón Interprofesional de la Alimentación (SIAL), la feria alimentaria más importante del mundo que se celebra en París cada dos años, donde la carne de caza silvestre ha estado representada con stand propio gracias al programa europeo ‘Carne de Caza Silvestre de Europa, naturaleza en estado puro’, que lidera la Asociación Interprofesional de la Carne de Caza (ASICCAZA).
Su participación en este evento buscaba dar a conocer las bondades de la carne de caza europea y en ese sentido se han mantenido más de un centenar de reuniones donde el potencial de la comercialización de este tipo de carne ha sido el punto más comentado. Gracias a estas reuniones se abre la posibilidad de que los comercializadores y distribuidores de carne de caza en España cierren acuerdos con operadores extranjeros. Un primer paso con el que ASICCAZA ha puesto de manifiesto las características únicas de la carne de caza para brindar a sus asociados la oportunidad de reforzar los canales de distribución de este tipo de carne, con el fin último de aumentar su consumo en el mercado europeo.
La delegación del programa europeo, que ha estado encabeza por el gerente de ASICCAZA, Jaime Hurtado, ha mantenido reuniones con importadores, distribuidores y cadenas de restauración y hoteleras, todos ellos interesados por este tipo de carne que actualmente es un gran motor económico en áreas rurales de España amenazadas por la despoblación. SIAL ha supuesto para el sector el poder presentarse ante nuevos clientes potenciales y reanudar los contactos con compradores europeos habituales, todo ello tras un parón por la pandemia que obligó a suspender la cita parisina en 2020 y la cual golpeó particularmente al sector, ya que la mayor parte de su consumo se asocia a la hostelería, que permaneció varios meses cerrada y con restricciones.
Nuevos distribuidores y profesionales de la comida preparada
Los representantes del proyecto ‘Carne de Caza Silvestre de Europa’ destacan dos perfiles diferenciados entre todas las reuniones mantenidas estos días en París. Por un lado, el interés de distribuidores que no comercializan carne de caza pero que se ha mostrado abiertos a estudiar la posibilidad, animados por las características de un producto así, que seguro que atrae a muchos de sus clientes. El otro segmento de profesionales tiene que ver con el sector de los platos preparados. Las recetas que se preparan dentro de este sector tienen que incluir alimentos con un alto valor añadido, totalmente naturales y con un gusto pronunciado para seducir al consumidor urbanita con un buen estatus económico y poco tiempo para cocinar. La carne de caza silvestre, que ya es un reputado producto gourmet en varios países de Europa, cumple con todos estos criterios, motivo por el cual ha atraído a tantos profesionales del sector de la comida preparada.
El 80% de las reuniones mantenidas fueron con operadores europeos, principalmente franceses, aunque también con representantes belgas, alemanes, italianos y rumanos. Fuera del ámbito de la Unión Europea, destaca el interés de los operados británicos, ya que allí existe una gran tradición por el consumo de carne silvestre y la valoran muy positivamente. Además, cabe resaltar las reuniones con importadores americanos y de empresas asiáticas situadas en países con China o Malasia. Todo ello ha sido posible gracias al amplio equipo de traductores multilingües con el que el programa europeo ‘Carne de Caza Silvestre de Europa’ ha podido atender a los profesionales interesados en este producto de primera calidad.
La valoración global, por tanto, es más que satisfactoria. La apertura de nuevos mercados de exportación de la carne de caza silvestre era el objetivo principal con el que esta carne se presentaba en París y se considera cumplido, a la espera de materializar acuerdos que ya han dado sus primeros pasos durante las cinco jornadas de duración de SIAL. ASICCAZA cumple así con una de sus principales funciones, la de servir de interlocutor válido para propiciar acuerdos que permitan la exportación de estos productos cárnicos entre los diferentes operadores económicos interesados, promocionando este producto único por sus características en la mayor feria alimentaria del mundo.